Según un reciente estudio de la agencia Europol, de la Unión Europea, la crisis económica mundial está influyendo en el aumento del cibercrimen, y una de las señales es que los estudiantes de carreras relacionadas con la Informática están siendo reclutados en las facultades y escuelas técnicas por bandas de crackers.
El estudio prevé que un número cada vez mayor de jóvenes desempleados se unirán al cibercrimen en los próximos años. Según el mismo informe Internet se ha convertido en una herramienta para el crimen organizado, que le ofrece comunicación, información, venta y reclutamiento. Entre los ejemplos que menciona Europol destaca que las organizaciones criminales están usando banca online, sistemas de apuestas online y de monedas virtuales para juegos online para el blanqueo de dinero. Existen incluso proveedores especializados en suministrar datos y herramientas a estos grupos de crackers, como p.ej. bases de datos de tarjetas de crédito.
La Guardia Civil detuvo el pasado jueves a un menor de Rivas-Vaciamadrid por realizar grooming a una compañera de instituto. Valiéndose de los contactos comunes con la chica, el joven de 17 años se ganó la confianza de la chica, de la misma edad, y pudo conseguir una fotografía que fuera comprometedora para ella; una vez obtenida inició la cadena de chantajes, amenazando con difundir fotos comprometedoras a través de Internet si no accedía a sus peticiones de proporcionarle fotografías aún más comprometedoras y de desnudarse frente a la webcam, de donde capturaba nuevos fotogramas con los que proseguir y escalar la coacción.
La investigación comenzó en mayo a raíz de la denuncia presentada por los padres de la menor, en la que afirmaban que su hija estaba sufriendo el acoso de una persona a través de una red social de Internet.
Al producirse estos hechos a través de una red social online, la víctima sospechaba que podría tratarse de algún conocido de su entorno, que hubiera tenido un sencillo acceso a su perfil.
El joven fue detenido el pasado jueves acusado de un delito de corrupción de menores y por haber capturado fotogramas de la emisión de la webcam de la víctima, se le imputó también el delito de descubrimiento y revelación de secretos.
En un nuevo caso de acceso ilícito a cuentas de Facebook en el Reino Unido, una joven de 23 años acusó a su expareja de haberla violado en repetidas ocasiones.
Para que su historia fuera más creíble, accedió a la cuenta de su ex para hacerse pasar por él y crear pruebas falsas, en concreto amenazas que dieran credibilidad a su denuncia.
Tras estas acusaciones, el joven fue arrestado durante unas horas.
Tras investigar el ordenador de la joven, esta fue arrestada ya que se demostró que había accedido ilegalmente al perfil de su expareja. Ahora deberá afrontar un arresto de cuatro meses.
Dos alumnas de 3º de ESO en Mieres grabaron con un teléfono móvil a otra estudiante del centro, de 1º de ESO, en el cuarto de baño, mientras hacía sus necesidades, y publicaron el vídeo en internet. Las imágenes fueron descubiertas por los padres de la víctima, que acudieron ayer al centro educativo para pedir explicaciones.
Los responsables del instituto identificaron a las autoras de la grabación, de 15 años, y fueron llamadas al despacho para una amonestación verbal. Durante el encuentro con la directiva del centro, una de las estudiantes, implicada en la filmación, negó repetidas veces y, entre lágrimas, tener conocimiento de que el vídeo se hubiera colgado en internet.
Por lo que ha trascendido las alumnas aseguraron haber grabado el vídeo como diversión y no por venganza contra la otra estudiante de menor edad.
Según la asociación de padres el caso se resolverá de puertas para dentro, puesto que los padres han decidido no presentar denuncia policial.
Los alumnos del centro también afirmaron estar al corriente.
La Consejería de Educación del Principado de Asturias aludió al respecto, al decreto de derechos y deberes que permite al propio centro educativo tener mayor autonomía sobre aspecto de convivencia en primera instancia. Por tanto el caso tan sólo pasaría a manos del Gobierno regional si el propio centro así lo considerase por no poder resolverlo por sí mismo.
No es la primera vez que se dan hechos de estas características en el concejo de Mieres en 2009. A principios de año, la dirección del instituto Bernaldo Quirós de Mieres llegó a expulsar a ocho alumnos de tercero y cuarto de ESO por colgar fotos de sus profesores en la red social Tuenti y realizar comentarios ofensivos y burlas sobre ellos.
Un usuario de Tuenti, de apodo McKiza, enfadado con esta red social online por la cantidad de eventos basura (spam) y falsos trasmitidos por medio de ella (y que según explicaba en un manifesto reivindicativo que adjuntó a un listado con las cuentas divulgadas enviado a GenBeta, llenaban su perfil ante la pasividad de los responsables de Tuenti), ha divulgado casi 4.000 cuentas de usuarios, incluidas las contraseñas.
El cracker también se quejaba de la escasa seguridad en la protección de los datos de sus usuarios:
Otro aspecto de tuenti es la seguridad… protegen tus perfiles? tus datos? tampoco lo hacen… Como muestra de ello me he centrado en conseguir reventar la seguridad del tuenti para ver la dificultad que tendria un persona con un poco de idea en programación para hacerse con algunas cuentas de tuenti y cual fue el resultado… aqui lo teneis:
Mas abajo veras una base de datos de usuarios de tuenti, con mas de 3800 cuentas (email y contraseña).
Solo espero que tuenti se ponga las botas, deje de buscar la forma de aumentar sus ganancias y visitas, y se preocupen un poco mas en la seguridad de los usuarios… La base de datos puede seguir aumentado, espero que solucionen todos sus problemas de seguridad.
Aunque Tuenti procedió a congelar dichas cuentas impidiendo el acceso de personas ajenas a las mismas que hubieran leído las contraseñas divulgadas por el cracker, desde GenBeta advertían del peligro que supone que muchos usuarios utilicen la misma contraseña para las redes sociales que para el correo, lo que los expone a que su correo sea accedido por personas que hayan podido ver esas claves.
Según comentaristas de dicho blog, Tuenti tenía otros graves problemas en cuanto a la privacidad, como que hace poco se podía acceder a todas las fotos/vídeos de cualquier usuario solo enviándole una invitación (sin necesidad de que la aceptara).
Tuenti explicó que el ataque no tenía nada que ver con fallos de seguridad sino que fue un ataque de phishing que usó técnicas de ingeniería social y que disponen de 25 personas dedicadas a vigilar y eliminar los eventos basura de los que se quejaba el cracker. Según el director de comunicación de tuenti, Ícaro Moyano, las cuentas comprometidas fueron 2.000 y no 3.800 como aseguraba el comunicado de McKiza. Aseguraron haber controlado la tema en menos de 2 horas y cerrar el web cebo que se estaba usando para captar las contraseñas y el que se usaba para difundir el listado de las mismas.
Tuenti enviará a los afectados un mensaje informándoles de cómo reestablecer el acceso a sus cuentas con una nueva contraseña y algunos consejos de seguridad.
Los ataques usan la ingeniería social haciendo picar a los ingenuos con ofrecimientos irresistibles para por ejemplo:
Los delitos informáticoshan pasado pasarían a tener consideración de delito penaltras la aprobación del si sale adelante el proyecto de reforma de código penal por parte del Gobierno de España.
Se tipifican en el proyecto como delito los ataques informáticos y se incluyen como conductas punibles las consistentes en:
Borrar, dañar, deteriorar, alterar, suprimir o hacer inaccesibles datos o programas informáticos ajenos.
Obstaculizar o interrumpir el funcionamiento de un sistema de información ajeno.
El acceso sin autorización vulnerando las medidas de seguridad a datos o programas informáticos contenidos en un sistema informático o en parte del mismo.
Los delitos relacionados con la propiedad intelectual también han sido serían modificados, de manera que los “pequeños manteros”, según palabras de Moncloa, podrán no ir a la cárcel.
Según el Consejo de Ministros, esta reforma pretende dar respuesta penal ante “nuevas formas de criminalidad, como las derivadas de las nuevas tecnologías”, entre otros objetivos, como el de someterse a las “obligaciones internacionales que España tiene contraídas, y más específicamente en el ámbito de la armonización jurídica europea, que exigen adaptaciones de nuestras normas penales”. En este caso concreto se inscribe, entre otros, la tipificación penal de los delitos informáticos.
Con esta reforma del Código Penal también se legisla pretende legislar la responsabilidad penal de las empresas, quienes podrán ser multadas, inhabilitadas o, incluso, disueltas.
¿Por qué son tan estrictos los profesores y directores de instituto con el uso de los móviles? Porque los móviles y los mp3 o mp4 son unas herramientas con las que se puede vulnerar la intimidad de los alumnos así como de los propios profesores.
El Reglamento Orgánico de Funcionamiento (ROF) de algunos centros incluye en un apartado la prohibición móviles o mp3.
Algunos centros aplican medidas expeditivas para prevenir el mal uso: la expulsión.
Grabar y llamar desde el móvil también está prohibido en el IES Gaona. «Es un delito grabar a menores o mayores sin su consentimiento y lo peor es que hay que advertírselo porque muchos no lo saben», reseña el jefe de estudios del IES Gaona, en Málaga.
En el instituto Torre del Prado si perciben que un alumno usa su móvil, se le retira y, generalmente, deben ir sus padres a recogerlo. «Lo primero es que ellos tienen muy claro que está prohibido utilizarlo y cuáles son las consecuencias. No queremos repetir episodios de otros centros que han saltado a la prensa por imágenes tomadas a docentes o a alumnos», como subraya el director del instituto Alfonso Balsera. Así los alumnos no podrán alegar ignorancia para zafarse de la reprimenda que, en muchos casos, es no poder asistir a clase.
Por motivos diferentes, padres y menores desconocen que muchas de las prácticas que los adolescentes llevan a cabo con las nuevas tecnologías tienen serias consecuencias penales.
El robo de claves, bien del messenger o de acceso a cualquera de las redes sociales está penado con hasta cuatro años de prisión; la usurpación de la identidad en el messenger puede costar otros tres años de cárcel, a los que se suma una hipotética condena por injurias o amenazas.
La mayoría de estas conductas tiene lugar sobre todo en la casa, en la que los menores tienen acceso sin control a ordenadores. La pelota, por tanto, no sólo está en la escuela, sino también en el domicilio familiar donde los padres, en la mayoría de los casos al borde del analfabetismo tecnológico son responsables de una generación sobrada en conocimientos digitales pero no demasiado consciente de sus consecuencias. Por ejemplo, es frecuente que ignoren que «internet deja rastro», es decir que los contenidos que por ejemplo se depositan en una red social pueden ser extraídos y manipulados.
Los expertos equiparan, para hacer un simil comprensible las imágenes que se cuelgan en redes sociales como Facebook, Tuenti o Twitter con «pegar fotos personales en una farola». Los chicos suelen ser candorosos y creer a pie juntillas en la identidad de sus interlocutores en los chat. Además, son usuarios activos de los programas P2P como el emule. «Se descargan contenidos que dejan en carpetas que tardan semanas en abrir. En muchas ocasiones esos ficheros ocultan pornografía», alerta el jefe del grupo de Delitos Tecnológicos de la Policía Nacional, Antonio Domínguez. Desconocer el contenido no exime de la responsabilidad penal.
Desde este inspector policial, hasta el fiscal de Delitos Tecnológicos, Jacobo Fernández-Llebrez, y el delegado de Educación, Antonio Escámez son unánimes al señalar que una medida tan eficaz como simple para detectar que los menores incurran en conductas delictivas o sean víctimas de ellas reside, simplemente, en impedir que tengan el ordenador en su dormitorio. En su opinión, debe de estar en una habitación común.
Otra fórmula eficaz es instalar filtros que impidan el acceso a determinadas páginas. Incluso el fiscal Fernández-Llébrez llegó a relacionar la irresponsabilidad paterna por no disponer de estas barreras con «ir con el niño de la mano por los prostíbulos de la ciudad».
Los responsables de la Fiscalía y de la Policía animan a los profesores a ayudar a los padres a evitar que los menores sean sujetos activos o pasivos de la delincuencia cibernética mediante actitudes que tampoco exigen un gran conocimiento de las nuevas tecnologías. Apostaron por estar al tanto de las relaciones personales de los menores, aunque con la prevención de que siempre prima el derecho a la intimidad sobre el de la educación. Ya ha habido chicos que han denunciado a sus padres por controlar sus conversaciones y han perdido.
El Instituto asturiano Avelina Cerra de Ribadesella ha impuesto un castigo de 5 días de expulsión a 19 alumnos que colgaron en la red social Tuenti fotografías hechas con el móvil en clase.
Los estudiantes sancionados se defienden alegando que las fotos no eran vejatorias ni se mofaban de nadie.
La directora del instituto, Marta Menéndez, justificó el castigo recordando que se ajusta al «procedimiento legal» que se establece en el decreto de los derechos y los deberes de los escolares, documento que regula las normas de convivencia en los centros educativos. Es decir, el centro escolar es el garante de la custodia y seguridad de los alumnos en el interior del recinto escolar, lo que incluye la salvaguardia sobre la imagen de los menores.
El divertimento de los adolescentes de fotografiar a sus compañeros y profesores para colgar las imágenes en internet ha alcanzado niveles tan preocupantes que incluso la Agencia de Protección de datos ha lanzado una señal de alarma por la vulneración de los derechos de imagen y a la intimidad. Este organismo recibió en enero la primera denuncia: la de un profesor que descubrió fotos suyas junto a insultos en una plataforma de este tipo.
Entre los usuarios de las redes sociales, se ha abierto un debate acerca de hasta qué punto pueden incurrir en un delito si realizan comentarios agresivos en la red. La preocupación viene tras hacerse público que Seis jóvenes extremeños de entre 16 y 19 años han sido imputados por un delito contra el honor por realizar un fotomontaje de una joven de 19 años y colgarlo en la red social ‘Tuenti’.
El agente responsable de la operación confirmó ayer que la investigación se llevó a cabo tras la denuncia presentada por la afectada. La joven recurrió a la Policía después de comprobar que alguien la había atacado en la red, un comportamiento que le estaba causando importantes trastornos. El fotomontaje había sido colocado en el ‘perfil’ creado por un joven, y tenían acceso a él varios amigos.
Desde el Grupo de Delitos Tecnológicos del Cuerpo Nacional de Policía se ha explicado que las denuncias relacionadas con Tuenti y otras redes sociales son más frecuentes de lo que se piensa. «No me atrevo a decir que diarias, pero en Extremadura entran todas las semanas denuncias relativas al robo de cuentas de correo electrónico o a vejaciones expresadas a través de la red. Para nosotros, todo lo que tenga que ver con un menor es grave, sobre todo por el trauma psicológico que le causa, y si hablamos de pornografía infantil la gravedad es infinitamente mayor».
Las investigaciones llevadas a cabo desde Extremadura no han detectado aún la existencia de pederastas residentes en la región que hayan colgado material en la red, pero sí han sido detenidas personas que se descargaban este tipo de imágenes prohibidas.
Más frecuentes son los robos de contraseñas de correos electrónicos, en ocasiones como una simple «gracia» y otras veces por despecho ante el fin de una relación de pareja. «La gente debe saber que el robo de cuentas de correo es un delito muy grave que se castiga en el código penal con penas de cárcel que van de 1 a 3 años».
Esa consideración hace que muchos de los denunciantes terminen buscando la forma de retirar la denuncia tras comprobar que el acusado es alguien al que conocen demasiado. «Este tipo de hechos suele darse en círculos cercanos y muchas veces no se imaginan quién puede estar detrás: se suelen llevar grandes sorpresas».
Ante una realidad creciente como ésta, la Policía recomienda ser muy prudente a la hora de introducir contenidos en las redes sociales y pide a las familias que estén alerta ante los posibles peligros que pueden correr sus hijos. «Los padres no suelen tener conocimiento de hasta dónde puede llegar su hijo. Internet mal utilizado tiene graves peligros».